Su luna de pergamino
Preciosa tocando viene
por un anfibio sendero
de cristales y laureles.
El silencio sin estrellas,
huyendo del sonsonete,
cae donde el mar bate y canta
su noche llena de peces.
Federico García Lorca, Romancero Gitano, 1928.
Vous devez être connecté pour poster un commentaire.